Pero ¿cuántos recuerdan o saben el antecedente de trascendencia pública que tiene su familia, particularmente su madre?. Alejandra Schultz, la mamá de Paula, la hija del recordado “Juan” y de Gladys, la hermana de Claudia; vivió un sueño a partir de 1980. Ese año fue coronada Reina Nacional de la Flor en Escobar. Y hoy, quien visita la Ciudad Floral en las sucesivas exposiciones y recorre la galería de las reinas, se encuentra con un hermoso cuadro que refleja toda la belleza de Alejandra, una de las soberanas predilectas del recordado Don Luis Brussi, presidente de la Fiesta Nacional de la Flor durante muchos años.
Alejandra representó al Lobos Athletic Club cuando fue consagrada soberana nacional de la Flor, y su regreso a Lobos significó una bienvenida triunfal con caravana de autos hasta llegar a Athletic, donde tomamos esta fotografía que ilustra la nota. Dueña de una belleza impactante, se abrió en aquel momento para Alejandra un mundo soñado, siendo requerida para múltiples actividades relacionadas con la moda y la publicidad.
Hoy Paula, su hija, prolonga esta historia. Pero es justo reconocer aquella consagración de Alejandra que fue motivo de orgullo para los lobenses 30 años atrás, porque se convirtió en la primera hija de nuestra ciudad en llegar a lo más alto de uno de los certámenes de belleza más codiciados del momento.
Después Lobos tuvo el privilegio de sumar otras dos soberanas en Escobar. Mariela Muxi en el año 1988, y en la década del 90 Marina Carranza.
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